Pato Garelik «La Leyenda»

MM: ¿Qué fue lo que te llevó a practicar esta disciplina?
PG: Mis padres preocupados por mi asma le preguntaron al médico que actividad hacer y les recomendó natación y artes marciales. Hice las dos cosas durante muchos años, inclusive llegué a competir en natación hasta la adolescencia, a la vez que competía en Taekwon-Do. Luego para alcanzar grandes objetivos necesitaba dedicarme más a uno y con la palabra de Horacio Anselmi en un curso de alto rendimiento me terminé de decidir…
Me dijo:
-«Si querés ser campeona mundial de Taekwon-Do tenés que dejar de nadar todos los días porque eso te genera fibras lentas y el Taekwon-Do requiere de las fibras más rápidas que puedas generar».
Dejé la natación para las vacaciones y me dediqué full time a Taekwon-Do. Pero lo más importante es que con la práctica de esos dos deportes y la ayuda de un psicólogo pude superar el asma.

MM: Quién fue tu más grande inspiración durante toda este tiempo?
PG: La primera, por la que siento ese motor interno que me moviliza a darlo todo es la bandera Argentina.
La bandera para mí es muy simbólica y movilizante, significa el sentimiento de representar a mi país, a mi gente, a mi familia,a todos los que me ayudaron a crecer en este camino y en la vida.

MM: ¿Cuáles fueron tus mayores logros durante toda tu carrera?
PG: Esta pregunta es difícil porque vos seguramente te referís a los podios y yo siento que los mayores logros no fueron las medallas.
Para mí haber competido en 16 campeonatos mundiales y haberme mantenido en un gran nivel durante los 32 años que llevo de práctica es uno de los mayores logros, tener alumnos que vienen a mis clases hace 25 años, es un logro inmenso, tener un profesor que me siga enseñando todos los días e irse contenta a casa en cada clase es impagable.
Después también gané 5 campeonatos mundiales y 7 panamericanos en combate individual, pero no creo que eso sea tan trascendente como todo lo anterior.

MM: ¿Pensaste alguna vez que serían tantos tus logros?
PG: No nunca pensé en las medallas, eso se fue dando,pero no fue fácil. El logro máximo es mantenerse en el tiempo, tener perseverancia y salir adelante. Me ha tocado ganar un mundial y entrenar muchísimo para el siguiente y luego perder en la primer pelea. Si uno logra desarrollar la capacidad para levantarse de eso vuelve con una fe y una autoestima mayor, y así se va construyendo una personalidad resistente, que encuentra soluciones o sabe procesar fracasos para volver a buscar victorias.Creo que eso es clave para auto superarse.

MM: En esta etapa de tu carrera ¿cuáles son tus principales objetivos? ¿Tenés alguna otra meta por cumplir en el Taekwon-do?
PG: Ya estoy retirada de mi carrera deportiva, le dí un cierre en el mundial de Italia 2015, tal cual lo había prometido unos meses antes cuando empecé la preparación. Las cosas salieron mágicamente como las soñadas, viajé al mundial con mi pareja y mi hijita, gané la categoría de lucha hasta 68kg y subí al podio con mi bebé. Fue increíble! Como quería que sea.
Ahora me estoy dedicando a mi escuela y a mis alumnos,me gustaría que crezca y acompañarlos a cumplir sus sueños.

También me gusta mucho hacer cosas por los que menos tienen, campañas solidarias, ayudar a conseguir doboks, escudos, equipamiento para comedores donde hay Taekwon-do, y otras movidas por alimentos o higiene, lo que se pueda.Todo suma y la sonrisa de un chico que recibe su dobok es impagable.

Y por último,quizás, si algún día se dá el marco para hacerlo, me gustaría ser entrenadora del equipo femenino de combate de la Selección Argentina. Pero está muy politizado y no me gusta eso porque yo tengo un gran sentimiento y me gustaría elegir a las mejores y para eso se necesita dejar la política de lado y ser sinceros con uno y con los competidores.
Creo que no ha llegado el momento para eso,y hay que trabajar mucho para que las cosas mejoren y se pueda dar esa transparencia. El tiempo dirá.

MM: ¿A quién querés agradecer y que crees que fue un pilar en toda tu carrera?
PG: Uy! Son tantos que no paró de agradecer!
Mi entrenador, Edgardo Villanueva, al que conocí en la primera selección que integre cuando tenía 15 años, fue pilar en toda mi carrera, incluso hoy en día, ya retirada sigue siendo mi profesor y le pido consejos para mí y mis alumnos. Llevamos 20 años juntos y tenemos una linda relación humana.

A mi hermana que compartió conmigo toda la primera parte de la carrera hasta que fuimos cinturones negros y me acompañó en el sentimiento fanático y apasionado durante toda nuestra infancia. A mis padres y mi hermano que bancaron en todo momento mi emoción, a mi pequeña familia actual que me acompaña cada día en mis locuras, a mis compañeros que pusieron el cuerpo para entrenar juntos y a mis alumnos, siempre fieles a mí.

MM: ¿Algunas últimas palabras personales?
PG: Me gustaría que todos sigan sus sueños, como horizonte hacia donde ir, que lo acompañen con mucho trabajo que es lo que sostiene una carrera, que no bajen los brazos y siempre que un sueño se cumpla, disfruten a pleno y al día siguiente sueñen otra vez!